Cómo tener un buen equilibrio ocupacional es un vídeo donde se define equilibrio y desequilibrio ocupacional y cómo conseguirlo mediante una serie de consejos.
El equilibrio ocupacional se entiende como la percepción o experiencia subjetiva que tiene la persona acerca de tener una cantidad adecuada de ocupaciones, la correcta variación entre las mismas y el uso del tiempo dedicado. Por lo que se identifican tres perspectivas: la primera en relación con las áreas ocupacionales en las que participamos, otra sobre el desarrollo de ocupaciones con distintas características, y la tercera en relación con el uso del tiempo.
La ocupación es el grupo de actividades que tiene significado personal y sociocultural. Comprende todo aquello que hace la persona para participar en sus roles más significativos. Estos roles se llevan a cabo con una serie de rutinas y actividades. Las ocupaciones se dividen en tres áreas: autocuidado, productivas y ocio y tiempo libre.
A lo largo de las 24 horas del día debemos tener un cierto equilibrio entre unas actividades y otras.
El equilibrio ideal se ve reflejado por una distribución equitativa entre las actividades de la vida diaria básicas, instrumentales, ocio, participación social y área laboral o educativa. lo que se consideraría tener una rutina saludable, sería tener: entre 9 y 10 horas de autocuidado, 9 horas de productividad y entre 4 y 6 horas de ocio.
Si no se dedica el tiempo suficiente a cada una de las áreas que hemos explicado, esas necesidades quedan sin cubrir. Por lo tanto, estaremos ante una alteración en nuestra calidad de vida. Podríamos llamarle desequilibrio ocupacional.
Algunos consejos para poder llevar un buen equilibrio ocupacional:
- Una buena organización.
- Saber adaptarnos.
- Intentar tener buenos hábitos saludables.
- No olvidarnos del ocio y el tiempo libre.